Un hombre sabio me dijo hace años que hay cosas que no puedes conseguir si vas directamente tras ellas. Si alguna vez has visto a alguien intentando sonar interesante, entenderás la observación de mi amigo. Hay muchas personas interesantes en el mundo, por supuesto, pero ellos alcanzan ese estatus dedicándose a las cosas de su interés, y su entusiasmo atrae el interés de otras personas.
Al menos en este sentido, la gestión de carteras a veces imita la vida. Los índices de factores vienen en muchos sabores, algunos tienden a la popularidad y momentum, mientras otros tienden a nombres de valores poco queridos, y así sucesivamente. Una división práctica es aquella entre potenciadores y mitigadores de riesgo. Como el nombre sugiere, los mitigadores de riesgo tienen menores niveles de volatilidad que los índices principales de donde sacan las acciones que los componen. Ejemplos conocidos incluirían familias de factores como baja volatilidad, “aristócratas del dividendo”, y calidad.